Exaltamos el esfuerzo de nuestros Congresistas en Senado y la Cámara de Representantes, para que el acuerdo de Escazú fuera ratificado en nuestro país, tras años de lucha ambiental y social. Escazú queda en Costa Rica y recordemos que el 4 de marzo del 2018, es decir, hace cuatro años y medio se aprobó este tratado internacional, mismo tiempo en el que no logramos que fuera ratificado en Colombia, por intereses particulares.
Hoy es una realidad, gracias a los debates, pedagogía y uso de la agenda legislativa liderada por nuestros congresistas, especialmente en la comisión segunda de Senado, del cuál hacía parte nuestro exsenador Antonio Sanguino. Esto posibilitó que el debate continuara en la nueva legislatura, haciendo realidad la ratificación del acuerdo de manera colectiva, pese a las dilaciones que algunos sectores querían mantener durante la plenaria que se llevó a cabo ayer en la noche.
Éste, es un homenaje a quienes han luchado por el cuidado del ambiente en nuestro país y han perdido la vida o sido víctimas de la violencia desmedida en los territorios. Por la participación, por la justicia y la defensa de los líderes ambientales, Escazú es una realidad.
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